Maldición de Tutankamon.
- Sangré palabras, derramé sentimientos en tinta y pese a eso no conseguí saciar el anhelo de mis deseos. Paradójicamente, la bondad se paga con maldad y la maldad con bondad. Es cierto que algo se está gestando entre las paredes de mi cráneo, tanto fruto de hacer sufrir experiencias amargas, como de vivirlas, y es por ello que estoy harta del trance que parece estar sufriendo mi vida. El tarro que contenía mi esencia se rompió hace tiempo y hace tiempo quedó divagando entre el oleaje de mis sueños. Que triste es el aburrimiento de una vida monótona en la que las pocas cosas que la salvan desparecen con pequeñas cicatrices que me es imposible curar, apenas recuerdo lo que era dormir sin imaginarse un vida perfecta porque la perfección de los días superaba a la de la imaginación, ahora solo pienso, y de pensar no obtengo sabiduría, sino rompecabezas incompletos que llevan a más quebraderos sin solución. ¿Dónde quedó mi deseo de ser buena persona?.. puede que se lo llevasen los desengaños y las mentiras, la ira y la frustración, el ver que la realidad siempre se antepone a la ficción. Puede que sea yo, que no encaje en lugar alguno, y pese a intentarlo puede que no esté adaptada a este mundo, o puede que exagere, que me crea incomprendida, diferente, y no sea más que otro peón en este juego, ¿qué más da?, tampoco me serviría de nada descubrir los propósitos que tiene deparados para mí esta vida, seguiría haciendo lo que hago hasta ahora; quejarme de los fracasos y darle poca importancia a las victorias, culpar de todo a la suerte. En unos días ni yo misma seré capaz de descifrar lo que escribo, “me habré abandonado a mi ser y se lo habré regalado al viento”, porque ¿para qué quiero ser nadie, si siendo alguien solo cometo errores y daño a quienes me aprecien?, mejor no estar en lugar alguno, no hacer acto de presencia, no establecer lazos y de ese modo obtener la libertad que impide que me aten los sentimientos, de ese modo dejaré de sentirme de esta manera, tan sucia y vulgar, tan hiriente y estúpida, tan.. yo.
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